Organización del pueblo Arhuaco: conferecia permanente desde 1978

Somos Confederación Indígena Tayrona, una organización de base creada en 1976 por las autoridades tradicionales del pueblo Arhuaco, kogui y Wiwa, y formalizada jurídicamente en 1978 para representar la voz viva del movimiento ancestral de los pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta.

¿Qué hacemos y dónde trabajamos?

Como organización del pueblo Arhuaco tenemos la misión de custodiar el corazón del mundo, el territorio ancestral que nos fue legado por los mayores, la cultura milenaria que guía nuestro caminar, y la palabra que nos vincula con el Estado colombiano desde nuestra ley de origen.

Trabajamos en defensa de la vida, el equilibrio de la Madre Tierra y el respeto por los derechos colectivos de los pueblos ancestrales. Nuestra labor se extiende por todo el territorio ancestral de la Sierra Nevada, desde las altas cumbres nevadas hasta la Línea Negra abarcando las cuencas que alimentan los valles, las piedra, ríos y árboles que guardan memoria y espíritu.

Nuestra misión es proteger el territorio, fortalecer la gobernanza indígena y asegurar que la voz de los pueblos sea escuchada con dignidad y respeto.

Nuestros pilares

En la organización del pueblo arhuaco creemos en hacer la paz, cultivar la armonía y tejer relaciones respetuosas entre instituciones, comunidades y el territorio. Solo así será posible la permanencia de los pueblos del mundo.

Pero "hacer la paz no significa ausencia de conflicto, sino presencia de propósito. Armonía no significa uniformidad, sino colaboración entre diferencias. Por eso la palabra lo es todo. En nuestra cosmovisión, hablar es un acto ceremonial, político y espiritual".

Conservación de la Biodiversidad

Nuestras acciones se centran en ser los guardianes del ecosistema de la Sierra Nevada, asegurando que la vida continúe prosperando.

Restauración ecológica: Reforestamos y sanamos los espacios del territorio que han sido afectados, siguiendo los principios de la Ley de Origen para mantener el equilibrio natural.
Gestión del agua: Implementamos y promovemos sistemas ancestrales de gestión del agua, protegiendo los ríos y lagunas que son la fuente de vida de la Sierra.
Vigilancia territorial: Realizamos recorridos de control y vigilancia para proteger nuestros sitios sagrados y recursos de la deforestación, la minería ilegal y otras amenazas.

Conservación de la diversidad cultural

Trabajamos para mantener viva nuestra identidad a través del conocimiento, los rituales y las prácticas que nos conectan con nuestros ancestros.

Educación propia: Creamos y gestionamos programas educativos para que nuestros niños y jóvenes aprendan la historia, la unión con la Tierra y las prácticas tradicionales de nuestros pueblos.
Transmisión de saberes: Facilitamos el intercambio de conocimiento entre los Mamos, los ancianos y las nuevas generaciones para que la sabiduría no se pierda.
Artes y Oficios: Fomentamos la producción de artesanías y tejidos que no solo representan nuestra identidad, sino que también son un vehículo de nuestras historias, valores y propiedad intelectual.

Autonomía y representación legítima ante el Estado

Actuamos como la voz legítima de nuestros pueblos, promoviendo el diálogo y la cooperación para defender nuestros derechos.

Incidencia política: Participamos en foros nacionales e internacionales para asegurar que nuestras propuestas y la Ley de Origen sean consideradas en las políticas públicas.
Defensa jurídica: Brindamos apoyo legal para proteger los derechos territoriales y la autonomía de nuestros pueblos ante el sistema judicial.
Diálogo con el Estado: Organizamos encuentros y mesas de trabajo con entidades gubernamentales para coordinar acciones que beneficien a nuestras comunidades y al país

Diálogo entre la sabiduría milenaria y la Ciencia

Promovemos el intercambio entre el conocimiento ancestral y la ciencia moderna para encontrar soluciones innovadoras a los desafíos globales. Tenemos que ir más allá de solo conservar.

La organización del Pueblo Arhuaco defiende que el territorio es fuente de sabiduría para la vida de las Sociedades.

Proyectos de investigación: Colaboramos con científicos y universidades para estudiar y validar la efectividad de nuestros modelos de agricultura, sanación y conservación.
Intercambio de conocimiento: Compartimos nuestra visión de la ingeniería ecológica y la biología relacional para enriquecer el pensamiento científico y promover una visión más sostenible del mundo.

Nuestro compromiso

En la organización del Pueblo Arhuaco creemos en el equilibrio entre dar y recibir, entre exigir y ofrecer, entre defender y compartir. Este principio de reciprocidad guía nuestras relaciones con el territorio, con los pueblos y con las instituciones que caminan junto a nosotros.

Consideramos la transparencia un valor vital para nuestra misión, entendida como un flujo de información honesto y constante, tal como la energía que circula en los ecosistemas de la Sierra.

Nos comprometemos a mantener una comunicación clara y cordial con nuestros colaboradores, financiadores y socios, asegurando que todos se sientan conectados y parte de un sistema que avanza en armonía.

Valoramos la colaboración como la clave de la supervivencia, inspirada en la simbiosis y la interdependencia de la naturaleza. Buscamos establecer relaciones genuinas, basadas en un trato directo y un intercambio justo de ideas y talentos.

Reconocemos que el aporte de cada persona no es solo un acto material, sino un pagamento espiritual que honra y fortalece nuestra causa común.

La gratitud es la base de nuestro compromiso. Sabemos que nuestra labor es exigente, por lo que valoramos profundamente a quienes nos acompañan.

Creemos que el acto de cuidar la naturaleza es, en sí mismo, una bendición que nos hace más nobles, creativos y pacíficos. Expresamos nuestra gratitud no solo de forma verbal, sino ofreciendo a nuestros colaboradores la oportunidad de aprender y crecer en una tarea que los conecta directamente con la sabiduría de la vida

Creemos en el equilibrio como una ley fundamental de la existencia, un ciclo constante de dar y recibir. Al dedicar nuestra energía a la causa, confiamos en que la institución naturaleza retribuirá a todos los que la apoyan.

Nuestro compromiso es garantizar que esta reciprocidad se extienda a nuestros colaboradores y socios, promoviendo un balance entre el trabajo y la vida personal que conduzca a un crecimiento mutuo y sostenible.